INGREDIENTES:
1
base de bizcocho fina
500
gr. de azúcar
1
copita vino dulce
1
vaso de agua
2
sobres de gelatina neutra
500
gr. de queso de untar
2
yogures griegos ó cremosos naturales
ELABORACIÓN:
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Aislamos con mantequilla un molde desmontable y colocamos una base
de bizcocho cubriendo todo el molde.
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Humedecemos la base con un jarabe hecho con 2 cucharadas de azúcar,
la copa de vino dulce y un chorro de agua, todo muy bien disuelto.
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Metemos el molde en el congelador.
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En un recipiente metálico echamos el vaso de agua, diluimos los 300
gr. de azúcar y los 2 sobres de gelatina neutra (reservamos el
resto del azúcar), mezclamos todo bien y le añadimos los 500 gr.
de queso untable y los 2 yogures.
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Batimos todo con la batidora para obtener una mezcla homogénea,
vertemos en un cazo y ponemos al fuego hasta que comience a hervir,
cuidando de que no se nos pegue, retiramos del fuego y dejamos
templar.
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Sacamos el molde y vertemos la mezcla. Volvemos a meter en el
congelador durante 2 horas ó más hasta que cuaje.
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Sacamos el molde del congelador y procedemos a elaborar el caramelo,
para lo que utilizamos un poco de agua y el azúcar restante.
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Cuando veamos que empieza a tostarse, lo vertemos encima de la
mezcla y lo metemos en el frigorífico.
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A la hora de servirlo lo desmoldamos y colocamos en una bandeja.
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