INGREDIENTES:
100 grs. de galletas tipo “Digestive”
50 grs. de mantequilla
3
cucharadas de azúcar
3
láminas de gelatina
1
mango grande y maduro
250
ml. de nata montada
200
grs. de queso fresco cremoso
1
yogur griego
200
grs. de fresas
ELABORACIÓN:
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Desmenuzamos las galletas, las mezclamos con la mantequilla y el
azúcar, hasta obtener una masa que nos servirá de base de la tarta.
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Cubrimos con esta pasta la base de un molde redondo desmoldable,
apretándola bien contra el fondo.
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Introducimos en el horno precalentado a 180º C de 5 a 10 minutos,
para que nos quede consistente.
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El siguiente paso es poner las láminas de gelatina en un recipiente
con agua hasta que queden blandas.
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Pelamos y cortamos el mango en dados medianos y trituramos con la
batidora.
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En un cazo al fuego echamos la gelatina y seis cucharadas del puré
de mango y calentamos hasta que la gelatina se disuelva por completo.
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Añadimos esta mezcla al resto del puré y reservamos.
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En un bol mezclamos con cuidado la nata montada, el queso y el yogur,
le añadimos el puré de mango y lo mezclamos.
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Vertemos la mezcla final en el molde donde tenemos la base de
galleta.
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Dejamos enfriar en el frigorífico durante 2 horas como mínimo.
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Serviremos frío y a la hora de presentarlo decoramos con las fresas
por encima previamente troceadas (por la mitad ó en rodajas).
- Os animo a hacerlo, es fácil y sus ingredientes muy sencillos, ¡eso sí!, si es para vuestros
invitados, hacedlo con antelación, teniendo en cuenta el tiempo del frigorífico.
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